Stroll: «No esperaba competir con mi compañero de equipo o luchar por el podio»
Stroll es consciente de que es un novato en la Fórmula Uno y no llegó esperando competir con su compañero de equipo o luchar por el podio
Mary | 31 marzo, 2017, 12:00 AM - Hace 8 años
Lance Stroll está en su primera temporada de Fórmula Uno como piloto oficial de Williams, además ha llegado en un año de cambios en el que los monoplazas son más exigentes para los pilotos y obviamente ha cometido errores, algo no demasiado singular en un novato. Pero además Lance Stroll es conocido por todos que ha tenido una tremenda ayuda de su padre, Lawrence Stroll, multimillonario canadiense para llegar con tan solo 18 años a la F1, por lo que para muchos es considerado piloto de pago y las críticas a sus errores son probablemente mayores.
Sin embargo Stroll pese a su juventud parece tener las cosas bastante claras y si hace pocos días reconocía que no le preocupaban las criticas ahora señala que sabe que se enfrenta a importantes desafíos, ya que hay un gran paso de Formula 3 a F1, reconoce que los coches son difíciles y exigentes de manejar y aclara que consciente de su condición de novato, no llegó pensando competir con su experimentado compañero de equipo o luchar por el podio. Incluso destaca que llegó a Melbourne pensando en ver como estaba y si se sentía más cómodo en el coche, ya que sabe que habrá cosas que funcionen y otras que le salgan mal.
Lance Stroll admite que los nuevos coches de 2017 son difíciles físicamente y mentalmente de pilotar y que las cosas pasan más deprisa, según declaró para Uol esporte: “Se trata de un coche de Fórmula 1. La demanda física del coche es definitivamente más intensa y también mentalmente, es una bestia que hay que controlar. Velocidades de curva son mucho más altas, las zonas de frenado son mucho más pequeñas, tienes que parar frecuentemente mientras hacemos el giro. Las cosas suceden mucho más rápido”.
Stroll también reconoce que encontrar el equilibrio ahora es difícil: “Cuando estás controlando el coche, tiene mucho agarre, pero cuando el agarre desaparece, es muy difícil de recuperar. Los coches de los últimos años eran diferentes y se podía jugar con ellos. Ahora es difícil encontrar el equilibrio sin perder el coche”.
Pero también señala que no piensa en competir por su compañero ni lograr grandes resultados, quedan muchas carreras y es consciente de que serán con altos y bajos: “No esperaba que competir con mi compañero de equipo o luchar por el podio. Vine a Melbourne para ver dónde estaba y sentirme más cómodo con el coche. Sé que hay 19 carreras más, en las que muchas cosas van a funcionar, pero muchas van a salir mal también.»