Boullier asegura sobre la pretemporada 2017 para Alonso: «Fue una mezcla de tristeza, humillación y frustración»

El equipo McLaren y el bicampeón Fernando Alonso sin duda han atravesado tres años muy difíciles en la asociación McLaren Honda. El inicio de la asociación fue un proyecto ambicioso y motivador, esperaban volver a tener una era de éxitos como la anterior, pero el resultado nada tuvo que ver con lo esperado. 2015 fue un año tremendamente duro con muy mala fiabilidad y rendimiento más que escaso, pero era disculpable al ser el primer año. En 2016 las cosas mejoraron un poco, no demasiado, la fiabilidad seguía sin ser muy buena y el rendimiento era mejorable, pero parecían progresar. Pero en 2017 cuando esperaban por fin un progreso, Honda no acertó con su motor y claramente volvieron a retroceder, lo que terminó con la paciencia de McLaren y su asociación, que ahora está rota y el año que viene serán motorizados por Renault.

Eric Boullier, director de carrera de McLaren, reconoce lo duro que ha sido este año para Fernando Alonso, un bicampeón y un piloto muy competitivo que se ha visto de nuevo en un coche con el que no podía luchar por resultados. Boullier asegura que Alonso como competidor se prepara mentalmente durante el invierno, fija sus propios objetivos y eso le motiva, pero en 2017 al llegar a Barcelona, y encontrar una situación inesperada con el rendimiento del motor, reconoce que tuvo una mezcla de tristeza, humillación y frustración. De hecho la frustración de Alonso a veces fue muy evidente como en el Gran Premio de Singapur, en el que tuvo que abandonar en la primera curva y esperaban una carrera competitiva, por lo que acabó dando un puñetazo en la pared de su habitación en McLaren. Para Boullier eso es por la rabia de que sabe que puede ser el mejor y necesita demostrarlo.

Eric Boullier asegura que Alonso se prepara mentalmente en invierno para la temporada y en 2017 la pretemporada fue frustrante, según declaró para Motorsport: “Como competidor, se prepara mentalmente durante el invierno. Se hace una idea en su cabeza de cómo debería ir la temporada y eso le motiva más porque se fija sus propios objetivos. Aparecer en Barcelona, y encontrarse una situación inesperada en cuanto a rendimiento del motor, fue una mezcla de tristeza, humillación y frustración. No fue positivo”.

Boullier reconoce que Alonso a veces tiene que mostrar su frustración como ocurrió en Singapur: “Algunas veces tiene que demostrar su frustración, pero sigue comportándose como en el pasado cuando ganaba carreras. Está tenso después de una carrera. Eso fue lo que pasó (en Singapur)”.

Para el director de carrera de McLaren, Alonso tiene la necesidad de demostrar que puede ser el mejor y cree que también golpeará la pared si gana: “Tiene esa rabia por dentro de saber que puede hacerlo mejor. Sabe que puede ser el mejor y necesita demostrarlo. Creo que si gana, también golpeará una pared”.

Boullier cree que si las cosas mejoran y Alonso cree que puede llegar al podio no cederá y presionará al equipo en positivo: “Siempre le comparo con un tiburón. Cuando huele la sangre, va directo a por ella. Por eso, si siente que puede estar en el podio o ser lo suficientemente competitivo como para estar allí, no cede ni una pulgada a nadie. De esta manera la presión recae sobre el equipo, pero es una presión positiva”.